Construir cualquier tipo de obra implica riesgos tanto para los trabajadores, como para los transeúntes que pasan cerca del lugar. Por esta razón, no hay que prescindir de esos recursos que van a ayudar a disminuir las probabilidades de que ocurra un accidente, como, por ejemplo, las mallas protectoras.
Estas superficies cumplen una función importante dentro del sector de la construcción, puesto que se convierte en una barrera que impide la caída de una persona o herramienta que pueda causar daños sobre aquellos que transiten a pocos metros del área de trabajo. La eficacia de este producto es tan impresionante, que los encargados de fabricarla utilizan materiales de primera calidad para que soporte un gran peso de varias toneladas.
Además de esto, gracias a las numerosas pruebas que se han realizado en laboratorios expertos, se llegó a la conclusión de que la malla con nudo es la que logra cumplir con los parámetros de excelencia. Por lo tanto, a la hora de invertir en este material, es fundamental tener en cuenta este detalle para conseguir mayor garantía de la efectividad.
Mallas protectoras una para cada proyecto
Para que funcionen a la perfección, estos elementos deben estar diseñados según las necesidades de cada cliente y la función que vayan a ejercer. Por ende, tiene que saber cuál es la meta que desea alcanzar, con el objetivo de que reciba el asesoramiento adecuado y se elabore correctamente.
Una de las más buscadas es la malla de escombro que se usan para evitar que pequeños fragmentos salgan de la zona donde se está trabajando y causen algún perjuicio a alguien que esté en el perímetro.
Por otro lado, están las mallas perimetrales o de seguridad que permiten delinear el área de alto riesgo, para prevenir incidentes; y las que se colocan en las fachadas para ofrecer una mejor privacidad y apariencia del proyecto. Generalmente, suelen sustituir al zinc para proporcionar un ambiente fresco y ventilado.
Los operarios podrán trabajar con mayor tranquilidad, sin miedo a sufrir una caída o a cometer un error que afecta la vida de un tercero. No hay dudas de que las mallas protectoras son las principales asociados en su oficio.
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